Alzar el propio vuelo no es una tarea fácil, no basta saber volar, no basta reconocer quién eres y de dónde vienes… implica la confianza absoluta de quién quieres ser para impulsar tu vuelo con coraje y valentía.
En mi experiencia profesional uno de los temas en los que constantemente debo apoyar a mis pacientes se relaciona con activar procesos de diferenciación, proceso que en términos sencillos se entiende como la oportunidad de construir la propia vida para desenvolverse de manera autónoma tanto en términos materiales como afectivos. Es un hito que permite convertirse en adulto pero que no todos los adultos logran transitar de manera consciente debido a diversas circunstancias.
La pregunta que me mueve entonces compartir a través de este espacio de reflexión es ¿Cómo ayudar a alcanzar el proceso de diferenciación? A través de estas líneas espero ayudar a quien lee a que pueda mirar su vida para avanzar en su proceso de adultez.
Probablemente una de las dificultades que nos encontramos al iniciar la vida adulta se relaciona con el hecho de que la sociedad nos impone un modelo de adultez que nos aleja de los sentidos fundamentales y nos lleva andar de modo automático. Sin pretender hacer un análisis sociológico, inicialmente observo tres características socioculturales que nos alejan de esas preguntas: orientación a la recolección de éxitos, exacerbación de la libertad individual, responsabilidad sólo desde el punto de vista material. La recolección de éxitos nos lleva a construir una especie de checklist de metas a concretar y que son validadas socialmente: terminar los estudios, encontrar un trabajo, tener dinero para tener un auto, una casa y viajar, pensar en un proyecto familiar, etc. Por otro lado, las transformaciones sociales nos han llevado a exacerbar la libertad individual por lo que sólo se entiende la adultez como un espacio de libertad sin reconocer lo que tenemos que hacernos cargo tras esa autonomía. Así mismo, si se llega hablar de responsabilidad siempre se asocia a lo material: encontrar un trabajo seguro y cumplir con esos compromisos financieros, etc.
Todo esto, desde mi mirada, nos lleva a alejarnos de preguntas fundamentales ¿Cómo quiero construir mi vida? ¿Qué quiero que sea lo importante en mi vida? ¿Qué me hace feliz? Te invito por algunos minutos a mirar lo que has construido y hacerte estas preguntas, profundizar si las elecciones están aportando a tu bienestar y tu felicidad. Mirar lo que has construido y hacia dónde quieres construir es un punto importante para reconocer las alas que te permitirán alzar ese vuelo. Lo interesante es que ese vuelo siempre puede redireccionarlo y darle un nuevo sentido.
Si has podido mirar hacia dónde quieres construir tu camino, también es importante mirar tu historia ¿De donde vienes? ¿Cuál fue el contexto donde naciste? ¿Quiénes te cuidaron? ¿Cuáles son tus dolores? ¿Qué agradeces de tu historia? Una premisa para la diferenciación es que nadie puede diferenciarse si no reconoce su pertenencia y eso implica una mirada profunda hacia nuestros contextos familiares. Lo que allí reconozcas te permitirá tomar conciencia del vuelo que has realizado hasta aquí, de lo que te fortalece y probablemente te duele de esa historia. Quizás esa conciencia te lleve a buscar sanación o a honrar esa historia y todo lo que te permitió construirte. Desde ese lugar, es posible establecer relaciones más seguras sin esperar que otros resuelvan parte de mi historia: ni la pareja, ni los hijos, ni las amistades.
Si has avanzado en ese reconocimiento puedes empezar a tomar decisiones importantes para construir tu camino, la pregunta que se abre entonces ¿Con qué te quieres quedar de ese legado? ¿Qué quieres soltar de esa historia? Quizás hay actitudes o formas de enfrentar la vida que tu familia te enseñó y que te serán útiles en tu propia historia, pero también hay otras que ya no sirven, que para la historia que estás decidiendo construir ya no son útiles y tendrás el desafío de encontrar las propias, quizás hay algunos tesoros ocultos que te servirán en tu propio viaje.
Alzar el propio vuelo no es una tarea fácil, no basta saber volar, no basta reconocer quién eres y de dónde vienes… implica la confianza absoluta de quien quieres ser para impulsar tu vuelo con coraje y valentía.
Cuando decides diferenciarte, probablemente muchos sientan admiración o se alegren en tu vuelo, pero también puede implicar abrir duelos, decepcionar las ideas preconcebidas del vuelo que se esperaba que realizaras por eso es un acto de confianza profunda en sí mismo, más allá de las expectativas de otros.
Te invito entonces abrir tus alas e iniciar tu vuelo…
Me ha encantado.